viernes, 5 de octubre de 2012

LA SOCIEDAD RED EN EL ÁMBITO EDUCATIVO

¿QUÉ IMPLICA LA SOCIEDAD RED EN EL ÁMBITO EDUCATIVO?

Sabemos que el siglo XXI ha sido definido por diversos enfoques como "la era de la información". Cada día se plantea el cambio como un fenómeno presente en todos los escenarios, de manera que aquello que no evoluciona o se transforma está destinado a desaparecer o a perder su funcionalidad social. Desde el punto de vista de este paradigma, la apreciación social indica la insatisfacción, de diversas maneras, por la reiteración de propósitos y medios de educación obsoletos. Se observa que, aún estando inmersos en una sociedad de la información, se carece de un proyecto de políticas nacionales dirigidas a poner al día las posibilidades de acceso y de utilización de las redes informáticas en el sistema educativo nacional. Esto no es privativo de México; es usual que los sistemas educativos nacionales carezcan de la suficientes visión y no hayan desarrollado estrategias para considerar la educación como una inversión que contribuya al desarrollo de los países y no como un gasto. 
Tomando como base la tendencias actuales, diversos estudios económicos desarrollados por la OCDE plantean, en un escenario de diez años, que los países que logren un desarrollo científico y tecnológico "equilibrado", que responda con la necesaria rapidez y flexibilidad a las demandas del mercado mundial, podrán integrarse a la sociedad de la información. Y si a esto se agrega la capacidad de producción de bienes y servicios incorporando las TIC en los diferentes ámbitos públicos como salud, educación, transporte, etc., su integración permitirá una transformación  en el desarrollo del capital humano, como elemento esencial del desarrollo del país en el corto y mediano plazos. 
A través del desarrollo científico y tecnológico se definen las directrices educativas que permitan a los individuos la producción de nuevos saberes  que den respuesta a las constantes necesidades presentes y futuras de la sociedad de la información, en la que la capacidad de almacenar y de tener acceso a la información y al conocimiento crecerá exponencialmente. 
En este contexto virtual, merece la pena reflexionar acerca del impacto que ha tenido la sociedad red en la actualidad en los procesos informativos, la forma en la que se ha propiciado que la educación se ubique más allá de los muros de la escuela; es decir, la influencia que ha tenido la red digital para que personas de diferentes edades puedan traspasar las fronteras de su espacio cotidiano, y para que, de hecho, cambie la práctica educativa del educado y del educador. 
Es importante especificar que la educación en red ha traído consigo lo que se conoce como la alfabetización digital, la cual consiste en el desarrollo de las habilidades y saberes básicos que se manifiestan en el manejo de la informática, la lectura y escritura que se realiza a través de los foros, chats, e-mails, así como una producción diversa de textos digitales disponibles en el espacio virtual, que actúan como estrategia para tener acceso al mundo virtual. 
La educación en red significa dar prioridad a las intenciones educativas con un sentido ético-político, dirigidas a la inclusión digital de diversos sectores de la población más desprotegidos socialmente, para que tengas acceso a la información, disminuyendo la brecha digital mediante la apertura de espacios de formación que contribuyan a la participación, intercambio de experiencias, saberes, lenguajes, etc. implica utilizar las tecnologías de la información y comunicación como herramientas para desarrollar ambientes de aprendizaje, que permitan, a través de la interconectividad, establecer redes, entendidas como la relación o encuentro de diversas personas conectadas a través de medios informáticos que propician la circulación e intercambio de textos, saberes y experiencias de los participantes, con un compromiso de relación solidaria. 

CONDUCTA ÉTICA: VALORES UNIVERSALES, DIÁLOGO Y DIVERSIDAD. 

De acuerdo con los sociólogos de la línea de Durkheim, el trabajo de promoción de valores en sociedades tradicionales se percibe como el fenómeno de iniciación en los usos y costumbres privilegiados por la sociedad adulta, lo cual ocurre cuando los niños y jóvenes son acogidos en un grupo social determinado. 
Así, el aprendizaje y la vivencia de los valores se promueven por la autoridad ejercida y la vigilancia por el respeto a los símbolos y a la reglas del grupo.  
Sin embargo, en muchas sociedades modernas, como la nuestra,  los niños y jóvenes forman parte de comunidades  en la que no siempre existen acuerdos acerca de lo que es bueno o deseable. Más aún, la diversidad de formas de participación mediadas por la tecnología, como el uso de teléfonos celulares con funciones multimedia, la proliferación de videojuegos con participación en línea, el uso de programas de mensajes escritos como el MSN Messenger,etc., es todavía más complicado calificar moralmente este conjunto de prácticas humanas emergentes dentro de la sociedad del conocimiento. 

En la sociedad del conocimiento, donde el contacto con otros grupos sociales de manera extraterritorial implica comprender y apreciar la diversidad con mayor urgencia, se requiere ajustes en las estrategias para construir consensos a través del diálogo, la negociación de puntos de vista y el logro de acuerdos mediados por las TIC. Así como el sujeto construye su identidad de manera situada en relación con las conversaciones que establece con otros, en la sociedad del conocimiento hay un riesgo alto de no reconocer como válidos los argumentos de sus interlocutores, así como de no reconocerse a sí mismo en la diferencia de puntos de vista. Esto es más apremiante sobre todo en los medios electrónicos, dadas la velocidad y multimodalidad de las transacciones, así como la falta de regulación en estos medios. 

Barber concluye que unos de los mayores atributos de las TIC, es irónicamente unas de sus principales desventajas cuando del desarrollo de valores ciudadanos se trata: la velocidad. Barber ilustra esta ironía citando el objetivo de este programa es el cultivo de habilidades de escucha, de debate y argumentación que permitan tender puentes entre distintos grupos y llegar a consensos. Sin duda, no hay reto más grande que lograr esta metas como parte del desarrollo moral de los miembros de esta nuevas sociedad del conocimientos. 

jueves, 4 de octubre de 2012

Educar bien a un hijo consiste en dejarle que pase 
un poco de hambre y un poco de frío. 


Confucio (551-479 a. C.)

EDUCAR ES DIFÍCIL, PERO HAY QUE HACERLO. 

Se habla casi siempre de las aportaciones de los padres a los hijos, pero no lo suficiente acerca de que los hijos aportan a los padres. Tampoco debemos perder de vista el hecho de que los padres somos, por definición, la prehistoria de los hijos. Cuando ellos empiezan su historia particular en el mundo, hace siempre un salto en el tiempo, una asincronía que revela dos experiencias diferentes de la historia. Nos encontramos conviviendo en el mismo espacio y en el mismo tiempo, pero los padres venimos de otro tiempo y de otro espacio... casi de otra galaxia. 


Todas las sociedades en la historia de la humanidad han desarrollado instituciones para la educación de los individuos y las colectividades, para que sean capaces de preservar las tradiciones civilizadas y, a la vez, para que sean el cauce ordenado de la imaginación hacia posibles transformaciones y mejores mundos. 
La historia de la educación enseña que las instituciones creadas con este sentido no tienen un carácter diferente del de las sociedades que les han dado origen, son una imagen de ellas; tampoco son la vía, por sí mismas, de nuevas formas de vida y de relación social o económica. 
La historia también enseña que los cambios en la educación, visto el agotamiento de un modelo, no responden a una evolución natural de la institución social sino, precisamente, a una voluntad de cambio y de mejoramiento, según nuevos paradigmas de formación de ciudadanos y de conocimiento. 
"El espíritu de los tiempos" de la actualidad establece las condiciones idóneas para que las teorías del aprendizaje, teorías de diseño instruccional, herramientas de enseñanza y aprendizaje confluyan en su lógica conceptual y procedimental con una sociedad del conocimiento. En este momento de la historia, toda la información que son capaces de generar las sociedades puede ser aprehendida por cualquier individuo en cualquier parte del mundo para transformarla en conocimiento. Por este hecho, las formas tradicionales de evaluación de la educación y, específicamente, del aprendizaje y de la enseñanza tendrán que ser sustituidas en poco tiempo por otras de mayor relevancia para los fines de la sociedad del conocimiento.